Lección número uno:
Dentro de un autobús, los asientos de las primeras filas están reservados a personas mayores, de movilidad reducida, ciegos, madres con niiños en brazos y embarazadas.
Lección número dos:
Mirar fijamente a alguien o a alguna parte de su anatomía (véase tripa de embarazada) es de mala educación.
Lección número tres:
No se ha demostrado que el ser humano pueda atravesar objetos ( o tripas de embarazada) con la mirada. NO
Lección número cuatro:
En caso de obviar las anteriores reglas, absténgase al menos de empujar y codear a la persona (véase mujer embarazada) a la que le quiere quitar el asiento libre.
Dedicado a los maravillosos seres humanos con los que, a diario, comparto la línea 30 del autobús en Zaragoza.
Madre mía como está el servicio urbano en Zaragoza. En mis tiempos en el 20 el único peligro que había era morir engullido por los fuelles de la parte central.
ResponderEliminarUn besito, y enhorabuena (también por el blog). Ya verás que bonitas son las noches en vela oyendo lloriqueos.
Er jitxo
Olé ese Jitxo guapo!! Estás en facebook? No sé ná de tí!!!
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