Amaneció. El sol, tímido, no se presentó a su cita.
Frío, humo, vacío. La nada después del ruido. Trivial noche.
Los escaparates me devuelven caricatura triste de lo que fui un año antes.
Serpentinas enroscadas en mi corazón.
Llegar a casa con los pies doloridos y fríos. Acurrucarse entre las mantas y no poder dormir. Y soñar con lo que vendrá ...
FELIZ AÑO
FELIZ PÁGINA SIGUIENTE
Sabes, siempre me ha encantado cómo escribes.
ResponderEliminarEs increíble el don de palabras que llegas a tener.
"Serpentinas enroscadas en mi corazón."
... Fascinante.
Un beso guapa.