El primer día de cole huele a forro y plastidecores. Emociones, nervios, leyendas urbanas...
Estrenas esperanzas, propósitos, agenda inmaculada. Un día para comerse el mundo, para sentirse capaz.
Siempre fue uno de mis días preferidos. No entendía porqué había que estar triste o lamentar volver al empezar. El verano era soledad. Septiembre era la ilusión.
BON COURAGE À TOUS!
Ais, si a mi me hacía ilusión hasta este año... Que ha sido uno de los mejores de mi vida!
ResponderEliminarYa le he preguntado a Teresa (mi tutora este añito) y me ha dicho lo mismo que tú, asi que en Febrero te estaré esperando!
Besitos para ti y Malena! :)